Por fin llegó el día. Ana Isabel me despertaba de madrugada con la sugerente frase: “ha llegado la hora” Y así fue, nos preparamos rápidamente, avisé a los abuelos y cogí a Sara para meterla en el coche – Papá, ¿es de noche? - preguntaba la pequeña – sí, cariño, duerme un poquito más. Ya en el coche, Sara nos volvía a preguntar - ¿dónde vamos? - y entonces entonamos la cantinela que habíamos practicado los meses anteriores: ¡Que vieeene Cristina! ¡Que vieeene Cristina! Todo fue muy rápido: parto natural, sin epidural y a las 3:45 de la noche llegó Cristina, chiquitita, con 2.660 kg, apenas 2 horas después de haberme despertado.
La familia crece, la familia cambia. Empezamos una nueva etapa, una nueva familia de cuatro, nuevos proyectos y nuevas ilusiones; también nuevos miedos, nuevas dudas: ¿cogerá bien el pecho? ¿engordará y crecerá rápido? ¿le prestaremos la misma atención que tuvo Sara? ¿y el mismo cariño? ¿tendrá Sara celos del bebé?
Cristina nació el 4 de mayo. Han pasado ya más de dos meses y crece sana y feliz; dos meses también que llevamos sin escribir en el blog, pero volvemos de nuevo para contar nuestros cambios, nuestras alegrías y todo lo que vamos aprendiendo de los niños con nuestra nueva maestra.
Me encanta la nueva foto de cabecera del blog!! :-D
ResponderEliminarY me encanta Cristina, el nuevo fichaje de la familia y la nueva maestra para todos ^_^
Recuerdo a una compi de trabajo que me decía "Cuando llegó el segundo entendí la frase ", espero que a vosotros no os de tanta guerra, jajaja, y de momento parece que es así, porque yo me la encuentro siempre dormidita :)
Uy, he puesto la frase entre flechitas y no ha salido! Lo que me dijo mi compañera es "Uno es ninguno", refiriéndose a que con la llegada del segundo hijo es marginalmente más complicado que con el primero, se nota más cambio de trabajo.
ResponderEliminarEnhorabuena por la llegada de una nueva alegría a vuestra familia. Seguro que después de dos meses ya habéis resuelto muchas de esas incógnitas que planteas sobre la nueva situación familiar, aunque seguro que se plantearán muchas otras. Cuando crece la familia, aumentan los desafíos, pero también se doblan las sonrisas, los abrazos, los besos y eso, ¡¡¡No tiene precio!!!
ResponderEliminarMuchas gracias a los dos; efectivamente, se multiplican los esfuerzos, las emociones, las alegrías...
ResponderEliminarQué bien que volváis a escribir!!!! Y también me encanta la foto que habéis puesto!!!!
ResponderEliminarMe encantan las fotos que habéis puesto, la de la cabecera y la de la entrada...sencillamente geniales!!!
ResponderEliminar(que graciosa Sara cotilleando como salía la foto)
Marieta
Hola Carlos!!.. hermosa tu familia y tu blog! Las fotos me encantaron. Saluditos
ResponderEliminarSilvana